El Akita americano es el resultado de cruces con un pastor alemán completados a lo largo de la Segunda Guerra Mundial y vendidos a soldados americanos que, a su regreso al país, introdujeron la novedosa raza en territorio estadounidense.
En España, según el real decreto, se considera un perro probablemente arriesgado, con lo que es obligación conseguir una licencia con seguro de compromiso civil y registrarlo en todos y cada ayuntamiento.
Carácter del Akita Inu:
El Akita Inu es relajado y raras veces padece agobio. De la misma otros perros norteños, el Akita es un perro muy sin dependencia y nada sumiso, con lo que tiende a ser dominante con otros perros. Es guardado con personas que no conoce pero muy leal a su amo y su familia. Es muy leal y bueno en las tareas de supervisión.
El Akita no es un perro ladrador, conque no ladra sin una aceptable razón. Esto se origina por que inicialmente fueron criados para continuar exactamente las mismas técnicas de acecho que los gatos. De ahí que, en el momento en que un Akita ladra, se debe tener precaución.
Educación y entrenamiento del Akita Inu
Siendo un animal con múltiples habilidades, dinámico, capaz y activo, puede ser empleado en muchas ocupaciones distintas, como el agility, la caza, varios deportes de herramienta etcétera.
El Akita Inu: una historia de honor y valentía
Es bien difícil comenciender la historia necesita y el origen de los Akita Inu, como sucede con otras razas con siglos de historia. En múltiples oportunidades fue popular con otros nombres Matagi-Inu (Perro de Caza), Kurae-Inu (Perro de Guerra) y Odate-Inu (Sabueso de la Providencia).
El Akita Inu era el perro de la casta noble y guerrera, tanto conque se afirmaba que si un samurái moría sin honor, podía reencarnarse en Akita, para redimirse, y fallecer con honor y lealtad por la parte de su dueño. Inicialmente era un perro de caza (oso) y a lo largo de generaciones fue empleado por los guerreros de El país nipón como perro de defensa y ataque.
¿Es el Akita inu una raza dañina?
Los Akita inus fueron incluidos en la lista de los llamados perros probablemente peligrosos. Esto sencillamente quiere decir que para su posesión es indispensable realizar los requisitos establecidos por la legislación de cada territorio. Probablemente arriesgado, esto no es mucho más que decir que, dado su tamaño, si va a llegar a agredir, ocasionaría graves daños.
Lógicamente, no es exactamente lo mismo el bocado de un Akita inu que el de un pequinés. Pero esta cuenta no supone que los Akitas sean perros violentos. En verdad, aunque con los extraños tiende a ser serio y guardado, con la familia es todo lo opuesto, llegando a ser realmente cariñoso, leal y noble, aparte de asegurador.