
El Akita americano es el resultado de cruces con un pastor alemán completados a lo largo de la Segunda Guerra Mundial y vendidos a soldados americanos que, a su regreso al país, introdujeron la novedosa raza en territorio estadounidense.
En España, según el real decreto, se considera un perro probablemente arriesgado, con lo que es obligación conseguir una licencia con seguro de compromiso civil y registrarlo en todos y cada concejo.
Higiene y limpieza.
El Akita Inu muda bastante, un par de veces por año: de enero a febrero y de mayo a junio. A lo largo de este periodo hay que cepillar al perro todos los días, o por lo menos 3-4 ocasiones por semana.
El resto del tiempo basta para peinarte 4 ocasiones por mes. Posiblemente haya fugas permanentes en una vivienda con aire muy ardiente y seco.
Historia
Recién a fines de la Segunda Guerra Mundial se diferenciaron las razas Akita de america y Akita Inu puesto que, hasta hoy, se consideraban como solo una. Su origen empieza en Akita donde se han encontrado documentos del siglo XVII donde se usaban para la caza. Más tarde, en el siglo XIX, se usó como perro de riña, cruzándolo con los molosos para acrecentar su tamaño y resistencia. Esta práctica fue derogada a inicios del siglo XX en El país nipón y a inicios de la década de 1930 el Akita fue considerado monumento natural, prohibiéndose su exportación fuera del país asiático.La evolución del Akita hasta nuestros días fue el resultado de la cruces de distintas razas, lo que al final forzó a clasificarla en 2 líneas: las Ichinoseki y las Dewa, estas últimas las que por último llegaron a suelo americano.
Después, tras la Segunda Guerra Mundial, Akitas se extendió por los USA, fundando el Akita Kennel Club, que entonces cambió su nombre en 1956 para transformarse en Akita Club of America. Pese al lugar del club, El país nipón no reconoció a la novedosa raza, lo que al final llevó al Akita Club of America a cerrar el árbol genealógico de ascendencia asiática. Hubo que esperar hasta la década de 1990 para que el club dejara la importación de la raza Akita Inu de nuevo, más allá de que ahora existían enormes diferencias como el importante tamaño del Americano y la elegancia del Akita Japonés.
La narración de los Akita Inu
Akita es una provincia del norte de El país nipón que disfrutaba de suma importancia en la Edad Media. Este perro recibe su nombre por el hecho de que se estima que la raza tiene sus raíces allí. La raza forma parte al conjunto Spitz, que incluye muchas razas de nieve y se identifica por tener 2 capas de pelaje, una cabeza de pelo cortito afín al de un zorro, orejas pequeñas y puntiagudas (para achicar la pérdida de calor) y una cola alta y erguida. hacia arriba.la espalda. Asimismo recuerdan a los perros norteños, como el Husky.
Se considera entre las 14 razas caninas mucho más viejas. Inicialmente era un perro de tamaño pequeño o mediano, pero en 1603 se comenzó a emplear para riñas de perros y desde 1868 se cruzaron con Tosa Inu y Mastín, incrementando de tamaño y perdiendo los aspectos propios del Spitz. En 1900 se prohibieron las riñas de perros y la raza subsistió y mejoró.
En relación al Akita
El Akita Inu es una raza de perro grande y vigorosa con una presencia noble y también intimidante. Inicialmente se usó para resguardar a la realeza y la nobleza en el El país nipón feudal. Akitas también rastreaba y cazaba cerdos salvajes, osos negros y, en ocasiones, corzos. Es un guardián valeroso y leal de su familia. El Akita no recula frente a los retos y no se amedrenta de forma fácil. No obstante, también son perros cariñosos, respetuosos y fanáticos de la diversión en el momento en que están bien entrenados y socializados.
El Akita es un perro grande y osado con una fachada claramente vigorosa: una enorme cabeza contrastante con pequeños ojos triangulares; y una posición estable y segura. La pura presencia de un Akita poderoso se utiliza para disuadir a la mayor parte de los agitadores.