A dios gracias hay varios expertos en el accionar canino y todo lo relacionado con el aspecto psicológico de nuestros amigos. Siempre y en todo momento te aconsejamos que consultes a un experto en el momento en que sospeches que tu perro puede estar tolerando una depresión.
Cuidados
Es una raza muy fuerte al mal tiempo pero perjudicada por ciertas anomalías de la salud genéticas y sensible a determinados medicamentos. Las patologías más habituales que debemos estimar son:
- Displasia de cadera
- Sistólica de rodilla
- Hipotiroidismo
- Atrofia de retina en personas mayores.
Historia del Akita americano
Esta pluralidad canina desciende de forma directa del Akita japonés, usada desde la Edad Media para la caza del oso, pero asimismo para perros de riña. Tras la Segunda Guerra Mundial, varios soldados estadounidenses retornaron a su país con estos perros como mascotas. Esto dio rincón a la cría de la pluralidad de america de Akita, famosa como la «línea Dewa».
En los ejemplares americanos se aprecia la predominación de cruces con otras etnias como el mastín o el pastor alemán, con lo que son de mayor tamaño y orientados a tareas protectoras. Con los años, las diferencias entre los 2 Akitas se han vuelto poco a poco más evidentes. Por tal razón, los criadores nipones demandaron que los perros de ascendencia estadounidense no fuesen considerados Akitas. Al final, en 2006, fueron reconocidos como una raza diferente bajo el nombre de American Akita.
Tu AKITA AMERICANO tira de la correa – ¿Qué no debe llevar a cabo?
No tire de la correa forzando a su Akita Americano hacia usted. O sea lo que tendemos a llevar a cabo naturalmente. Pero cuanto mucho más tire hacia un lado, mucho más va a ir su Akita americano en la dirección opuesta tirando mucho más fuerte de la correa. Si lo realiza, va a haber un equilibrio de poder que se establecerá y volverá a suceder con cada ejecución.
¿Cuáles son los síntomas del parvovirus canino?
Los síntomas perceptibles de este virus en los perros chiquitos son sangrado, estado anoréxico, vómitos, diarrea y heces gris-rosadas. El curso de esta patología puede ser realmente severo, en tal caso el perro se deshidrata seriamente y muere en 2 o tres días. Hay que prestar particular atención al cachorro, en especial entre sus 2 y 4 meses de vida, en el momento en que el animal ahora no posee la protección que le proponen los anticuerpos de la leche de la mamá merced al calostro.