Tener un perro en el hogar puede ser una experiencia muy gratificante y enriquecedora, especialmente cuando creas un vínculo y estableces una correcta convivencia con este animal. Pero asimismo hay que decir que en el momento en que crías un perro, tienen la posibilidad de suceder imprevisibles o ocasiones fuera de tu control, que hacen que tener un perro sea difícil o bien difícil; singularmente tratándose de travesuras caninas o mal accionar, que puede ir desde morder zapatos, escalar muebles, romper cosas, morder, ladrar regularmente, o aun tirar o escalar a la gente.
Estos hábitos caninos tienen la posibilidad de frustrar al dueño del perro y, en consecuencia, reaccionar de forma inadecuada intentando de eludir estos hábitos no amigables, regañándolo con un grito o, a veces, aun golpeándolo; No obstante, tienes que tomar en consideración que corregir a un perro regañando, chillando, pegando o amedrentando no solo evitará que el perro se dé cuenta de que algo anda mal, sino esta clase de interacción asimismo puede perjudicar su confort físico y/o sensible. . seriamente.
De qué forma educar a un cachorro a fin de que no llore en el momento en que lo dejan solo
Es habitual estimar pasar el mayor número de horas viable con tu cachorro. ¡Es tan precioso! Pero la verdad es que en el final deberemos dejarlo en paz. Así sea para proceder a trabajar o para ayudar a una asamblea a la que no consigas ayudar.
¿Qué debo realizar para eludir que mi mascota muerda?
Una vez eliminadas todas y cada una de las causas precedentes, es esencial accionar. Para eludir que nuestro animal tenga un accionar belicoso, tenemos la posibilidad de proseguir una secuencia de pautas o utilizar fáciles trucos que mejoren su carácter.
- Juega con él. Educar con reglas y límites a través del juego siempre y en todo momento es buena opción. A lo largo del instante de relajación es esencial señalar que no eres su presa, pero ¿de qué manera llevarlo a cabo? Dé juguetes que desvíen su atención de usted.
- Tiene una reacción con tranquilidad. Si tu mascota te muerde o araña, no le chilles, no la persigas ni la confundas dándole cariño o gominolas una vez que te ataque. Háblale con solidez pero con tranquilidad a fin de que se dé cuenta de que tienes el control.
- No los abrumes. Tratándose de gatos, su naturaleza solitaria y también sin dependencia con frecuencia puede molestarlos si los abraza bastante. Detallan su cariño por lo menos te lo esperas.
- Ejerce ejercicios para educar y eludir que te piquen. Para conseguir desenlaces positivos, es efectivo emplear ejercicios por asociación o consecuencia con él a fin de que aprenda que las cosas se tienen la posibilidad de poder sosteniendo la tranquilidad. Un ejercicio frecuente es coger una pelota entre los dedos y, si la recoges de forma cuidadosa sin morderla, dártela. Si no, espera que pregunte amablemente.
Si es un cachorro, dale tiempo
Frecuentemente nuestro perro se porta mal por el mero hecho de ser un cachorro. Los perros chiquitos tienen mucha energía y son muy curiosos sobre el planeta que los circunda. Esto, conjuntado con su falta de conocimiento del bien y del mal, de forma frecuente los transporta a actuar de forma inadecuada. Es esencial explicarle las reglas a nuestro perro y corregirlo apropiadamente, teniendo asimismo presente que muchas de las formas de proceder que tiene en esta etapa acostumbran a corregirse transcurrido un tiempo.
Silbato de entrenamiento para perros
¡Lo deseo!